No sé si será muy correcto el hablar hoy de la Semana Santa. Entre otras cosas porque me considero un ateo perdido y convencido, y porque en estas fechas todo el mundo católico está muy sensible con esto de las procesiones, las películas sobre la pasión y los ayunos y rezos pertinentes. Pero qué le vamos a hacer, ni yo soy políticamente correcto, ni me importa lo mas mínimo que puedan ellos pensar de mis pensamientos. Tampoco soy lógico ni consecuente con mis actos. Un desastre. Lo sé.
Me gustaría que alguien me explicase qué pintan en estas fechas las procesiones, con sus penitentes, sus pasos, sus estatuas y sus imágenes. Me gustaría saber por qué los penitentes llevan trajes y capirotes con tan alto valor económico. Me gustaría entender por qué las imágenes de la virgen o de Cristo son tan ostentosas, tan llenas de joyas y telas nobles. No me entra en la cabeza que alguien pueda entrar en éxtasis por la simple visión de una imagen. No creo coherente que halla ese despilfarro de dinero, de esfuerzos y de rezos y lágrimas cuando hay tantas cosas importantes y urgentes por hacer. No alcanzo a vislumbrar como el tormento de algunos puede llevar a su salvación. Si todo esto se refiere a recordar unos hechos que dieron comienzo a una religión, pienso, en mi infinita inocencia, que debería ser lo mas realista posible. No sé que tiene que ver un paso de Semana Santa, con vírgenes engalanadas y llenas de riquezas, con el personaje histórico de la virgen María. No me entra en la cabeza. Ya sé que soy un poco duro de mollera, pero así están las cosas.
Lo único positivo de estas fechas, son los días de vacaciones que nos cogemos todos, o casi todos. Aunque, siguiendo mi faceta negativa, también diré que en estas fechas, mucha gente se deja la vida en las carreteras. Con todo esto, no acabo de ver qué beneficio tenemos con la Semana Santa tal y como la conocemos. Propongo que continúe esta tradición, en su faceta lúdica, pero que se prohiba a la gente salir de sus casas, para evitar accidentes. Así todos tendremos mas paz interior y mas tiempo para meditar sobre las cosas mundanas y divinas de este nuestro mundo.
Frase del día: "la religión es el opio del pueblo"
Me gustaría que alguien me explicase qué pintan en estas fechas las procesiones, con sus penitentes, sus pasos, sus estatuas y sus imágenes. Me gustaría saber por qué los penitentes llevan trajes y capirotes con tan alto valor económico. Me gustaría entender por qué las imágenes de la virgen o de Cristo son tan ostentosas, tan llenas de joyas y telas nobles. No me entra en la cabeza que alguien pueda entrar en éxtasis por la simple visión de una imagen. No creo coherente que halla ese despilfarro de dinero, de esfuerzos y de rezos y lágrimas cuando hay tantas cosas importantes y urgentes por hacer. No alcanzo a vislumbrar como el tormento de algunos puede llevar a su salvación. Si todo esto se refiere a recordar unos hechos que dieron comienzo a una religión, pienso, en mi infinita inocencia, que debería ser lo mas realista posible. No sé que tiene que ver un paso de Semana Santa, con vírgenes engalanadas y llenas de riquezas, con el personaje histórico de la virgen María. No me entra en la cabeza. Ya sé que soy un poco duro de mollera, pero así están las cosas.
Lo único positivo de estas fechas, son los días de vacaciones que nos cogemos todos, o casi todos. Aunque, siguiendo mi faceta negativa, también diré que en estas fechas, mucha gente se deja la vida en las carreteras. Con todo esto, no acabo de ver qué beneficio tenemos con la Semana Santa tal y como la conocemos. Propongo que continúe esta tradición, en su faceta lúdica, pero que se prohiba a la gente salir de sus casas, para evitar accidentes. Así todos tendremos mas paz interior y mas tiempo para meditar sobre las cosas mundanas y divinas de este nuestro mundo.
Frase del día: "la religión es el opio del pueblo"
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