domingo, 25 de mayo de 2008

TELEVISORES Y MODAS


Los constructores de televisores no saben el gran favor que están haciendo a esta nuestra cada vez mas superficial sociedad. Ahora todas los monitores de televisión son planos, tft, plasma, ddt, hdmi, hd, y miles de siglas mas que pocos entienden. Todos son el formato panorámico. 16:9 que dicen los entendidos. Formato muy apropiado para ver películas, ya que practicamente todas tienen ese formato y por ello son apropiadas para ese tipo de televisor. Pero, ¿qué ocurre cuando ves un programa normal, en formato normal, o una serie también en formato normal?. Pues que todo te parece mas ancho. Bueno, no te parece mas ancho, es que es mas ancho. Las caras son mas anchas, las personas son mas bajitas, las caderas son mas anchas también. Todo en definitiva es mas ancho y mas bajito. De este modo, nos acostumbramos a ver a la gente ancha y bajita. Lo vemos como algo normal. Y nos olvidamos de las tallas pequeñas, los modelos de mujer delgados y con tipito. El subconsciente se habitúa a ver como algo normal lo que, realmente, es normal. Porque no nos engañemos, lo que no es normal son las mujeres-tabla, los hombres-tablón y los estereotipos de personas de pasarela. Lo mas normal, a partir de cierta edad, son las cartucheras en mujeres y los flotadores en hombres. Las caderas anchas en las mujeres y las tripitas prominentes en los hombres. Es el orden natural de las cosas en la evolución de las personas. Podemos intentar, gimnasio mediante, apaliar algo los efectos de nuestro sino, pero no podemos evitarlo. Quizá si podamos echando horas y horas en el gimnasio, pero eso nos quita un tiempo valioso en disfrutar verdaderamente de la vida, de los pequeños detalles que, al fin y al cabo, son los que nos hacen plena nuestra existencia. Pequeños detalles como puede ser una cerveza y una tapa que ayuden a crear nuestra figura natural. Como un cortado acompañado de un croissant relleno de chocolate que afiance nuestras curvas. Como una siesta después de dormir que haga que nuestra digestión sea mas lenta y nuestro proceso de engorde mas rápido. Dejémonos de hacer footing como unos posesos en pos de la figura perfecta. Al fin y al cabo, correr es de cobardes. Olvidemos las abdominales matutinas que contribuyen a formar un vientre plano o un vientre "tableta-de-chocolate" y que lo único que puede acarrearnos es un tirón en nuestras cervicales o en alguna de nuestras maltrechas vertebras. No hay nada mejor como levantarse por la mañana con los ojos pegados por las legañas, acariciar con cariño nuestra tripa, seguido de nuestros genitales, rascar nuestro pelo desaliñado e ir trastabilleando hacia el aseo a evacuar. Una ducha relajante, un desayuno potente, y a funcionar. Con nuestra barriga, nuestras cartucheras, nuestros flotadores y nuestra espalda encorvada. Es el orden de las cosas, y no deberíamos hacer nada por evitarlo.
Frase del día: "la felicidad está donde la encuentras, rara vez donde la buscas"

No hay comentarios: