jueves, 29 de noviembre de 2007

PROFUNDIZANDO UN POCO

Fulgencio Merallo Cortés ( El Periódico Mediterraneo - 29/11/2007 )

Nunca me da por pensar en la muerte hasta que no me toca de cerca. Es entonces cuando mi neurona se pone a trabajar y meditar sobre que habrá mas allá, qué pasará cuando morimos. Imagino que es una pregunta que ha existido siempre, desde el principio de los tiempos, e imagino que nunca nadie ha hallado una respuesta convincente. Porque lo que es respuestas hay muchas, una de ellas, la que nos da todas las religiones: la muerte es un paso a otro estadio, a otra vida, llámese paraíso, infierno, reencarnación, que te toquen 100 vírgenes como si fuera la lotería, o lo que quieran contar. Evidentemente, no hay que ser muy espabilado para ver la similitud entre todas las respuestas que nos dan. En todas ellas nos dicen lo mismo: no os preocupeis, que despues de esta vida hay algo mas, que no se acaba. Y claro, esa es la respuesta que todos queremos y necesitamos oir. Es muy díficil pensar que cuando se acaba, pues no hay nada. Todos decimos "pero como voy a dejar de pensar?, dónde van mi consciencia, mi saber, mis ideas?" Por supuesto, nuestra mente no está preparada para imaginar la nada, el vacio absoluto. No podemos creer que somos como una televisión cuando se le da al boton de apagado. Tampoco podemos creer que cuando se va una persona querida y cercana, se acaba todo. No queremos creerlo, necesitamos creer que su historia sigue, que sigue vivo en algún sitio. Y ahí es donde entran a jugar su papel las religiones. Yo, personalmente, pienso que las ideas, los sentimientos, la sabiduría y todo lo que forma parte de una persona, cuando esa persona muere, no desaparecen. Quedan entre los que han estado en contacto con ella. Tanto lo bueno como lo malo. Y según se incline la balanza del bien o del mal de esa persona, así será su cielo o su infierno en los corazones de las personas que quedamos. No hay que ser muy astuto para deducir en qué lugar queda la balanza de mi jefe, compañero y, sobre todo, amigo.

1 comentario:

tesa dijo...

Sabemos que significaba para ti.Mejor no lo podrías describir... TIENES UN CORAZÓN DE ORO