sábado, 1 de noviembre de 2008

LA LEY INNATA


"Existe, de hecho, jueces, una ley no escrita, sino innata, la cual no hemos aprendido, heredado, leído, sino que de la misma naturaleza la hemos agarrado, exprimido, apurado, ley para la que no hemos sido educados, sino hechos; y en la que no hemos sido instruidos, sino empapados." (Marco Tulio Ciceron)
Este rollo que os he puesto arriba es la traducción de la portada del último trabajo de Extremoduro, La Ley Innata. Una ley no escrita que todos tenemos dentro, que forma parte de nosotros, no escrita y diferente a cada persona, que nos rige en muchas de nuestros comportamientos.
¿Y qué tiene un álbum de Extremoduro para ponerlo en este blog? Pues que, a mi humilde entender, han hecho el mejor disco de toda su carrera. Nunca han sido, excesivamente, santo de mi devoción este grupo. Me gustan algunas canciones y tal, pero nunca han sido un grupo al que me tomara demasiado en serio. De hecho, cuando salió este último disco no me ilusionó demasiado, que digamos. La primera vez que lo escuché, como le ha pasado a mucha gente, me pareció únicamente un disco curioso, una sola canción dividida en varios cortes. Vamos, que te deja un poco frío. La segunda vez que lo escuchas ya empiezas a sentir que es algo especial. A la tercera ya no puedes dejar de escucharlo una y otra vez. Canciones con multitud de cambios de ritmo, con instrumentos de viento por en medio, estribillos pegadizos y letras que avanzan y retroceden.
Cuando lo has escuchado unas cuantas veces, y te fijas en la letra, según he constatado, cada uno hace su interpretación libre. Con la forma característica de los grupos de rock español, van dando pistas sobre lo que Robe quiere expresar en este barullo de frases, algunas poéticas, otras duras y crudas. He escuchado diversas versiones de lo que este poeta callejero extremeño quería transmitir en el disco. Una de las mas curiosas es que vive en un pueblecito del Pirineo aragonés, todo el día en una nube gracias a la ingesta exagerada de drogas, y que lo que expresa es una sucesión de desvaríos propias de un colgado.
Mi interpretación, muy libre y muy personal, es que se trata, en su conjunto, de los sentimientos y las fases por las que pasa una persona, o en este caso él, en un trago tan duro como es el desamor. Cuando has sido abandonado por la persona amada. Yo lo veo reflejado tanto en la dureza de las letras en varios pasajes del disco acompañadas de música rápida y guitarrera; como en la tranquilidad de otros, tanto musicalmente como en las letras. Añoranza, sueños, rabia, desgana, locura, ilusión y, por último, en su Coda Flamenca, el intento de superación del mal trago. La lógica por la que defiendo mi tesis es que, todas las grandes canciones, los grandes poemas, los grandes álbums de los grupos han nacido del desamor, mucho mas que del amor. El desamor produce unos sentimientos mucho mas fuertes que los que produce el amor. Todos los grandes genios han sido almas atormentadas que han sabido transformar ese dolor en arte.
En definitiva, que Extremoduro han puesto el listón muy alto para que alguien venga a superar este su último trabajo. Se han pegado una gran pasada con esta opera-rock extremeña que nos obliga a escucharla una y otra vez sin atisbos de cansar. Un 10 para ellos. Si señor.
Frase del día: "por mis pecados sigo preso"

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